Cuando sientes rabia, estas en
paz. Pero cuando experimentas rabia y te resistes a ella al no querer sentirla,
pierdes esa paz.
Sentir lo que sientes es
coherencia, y ser coherente es elegir paz. Es cuando juzgas lo que sientes como
“incorrecto” o “negativo” cuando pierdes tu coherencia y abandonas tu estado
natural de paz.
O sea que has estado en paz toda
tu vida, pero no lo sabías. Dicho de otra manera, no eres consciente de lo que
ya tienes, entonces crees que no lo tienes. Al creer que no lo tienes, sales a
buscarlo por ahí fuera, y es entonces cuando te pierdes. Pero tranquilo que
siempre hay alguien para guiarte; pero no encontrarás esa guía mientras continúes
buscando ahí fuera, porque estarás distraído en esa insensata búsqueda que es
siempre inútil, ya que nunca encuentras lo que buscas. Y no lo encuentras
porque si has de encontrar paz, tan solo puedes hallarla en el presente. Pero tú
has juzgado tu presente como carente de paz, lo cual implica que la paz no se
encuentra en tu presente; paradójicamente, el único lugar donde puede estar. Ya
que si no es ahora, no es en
absoluto.
Ahí es cuando empiezas a soñar
con el futuro, o a añorar el pasado. Es entonces cuando tu percepción de tu
propia vida se desenfoca a tal punto que necesitas ayuda para volver a ver
mejor. Y como ya dije, esa ayuda solo puedes encontrarla en tu interior.
Por eso es que se siente tan fea
la rabia, porque te olvidaste que formaba parte de tu estado de paz. Has
rechazado tus sentimientos en vez de abrirte a sentirlos, y esa resistencia te
paraliza. La única salida es entonces aceptar tus sentimientos ahora, permitir
que sean tal y como son, sin juzgarlos; estarás entonces permitiéndote ser tu mismo. Tras ese permiso, se encuentra la Paz Absoluta que sobrepasa todo
entendimiento.
De manera que así es la cosa. Honestamente
yo me di cuenta de esto un buen día y entonces empecé a seguir a ese guía interno.
Acá estoy ahora, viendo mucho más claro todo. O mejor dicho, viendo; porque
antes me encontraba en penumbras. Puede que tu camino no se parezca al mío en
cuanto a la forma, pero te aseguro que el contenido es el mismo. La Verdad es verdad porque es para todos.
Te hallas completamente perdido y
necesitas ayuda para volver a casa. Todos nos encontramos buscando el regreso a
casa. Ese es el camino de la Paz, un camino espiritual profundamente honesto y
eficaz, el cual todos emprenderán algún día. Algunos ya lo estamos andando. Tú
que lees esto, ya lo has emprendido también. Sigue fielmente esa luz que te guía
desde tu interno y Despertaremos juntos de este sueño.
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